Con este nuevo post, vuelvo después de unas
excelentes vacaciones, a estar en contacto con vosotros. Espero seguir contando
con la estupenda aceptación que he tenido a la fecha. Personalmente, nunca me
lo imaginé y menos escribiendo solo en español. Son ya más de 106 mil las
entradas al Blog. Esto sin duda me produce mucha satisfacción y me obliga a
esforzarme con cada entrega. Gracias a todos los que las leéis, y a quienes,
de vez en cuando, me hacéis comentarios.
Aunque en principio el título pueda parecer un tema
que no va en la línea del Blog, cuya orientación fundamental es: plantear cómo mejorar la gestión y alcanzar
un verdadero liderazgo de empresas y organizaciones en los mercados donde operan,
a objeto de transformarlas en altamente eficaces y competitivas. Eso sí,
mediante una competitividad contraria de cómo se ha venido y se está haciendo
en Europa, especialmente en los últimos años. Me refiero a: sin destruir la masa laboral, todo lo contrario, apoyándose en el
talento, conocimientos y competencias de las personas que la conforman. Es así
como se construyen empresas eficaces y de éxito.
Por lo señalado, he llegado a la conclusión que el
tema implícito en el título, sí entra y mucho, en la orientación del Blog. Intentaré
a lo largo de los post dejar claro, por qué considero que es coherente con el enfoque
del mismo y con el momento que vivimos.
UN BREVE PLANTEAMIENTO HISTÓRICO
Desde hace aproximadamente algo más de 45 años, mediados de los años 60, he
escuchado, con bastante frecuencia, la expresión
que sirve como título a esta entrega. Siempre, relacionada con situaciones
críticas. Aclaro que en aquellos momentos, no le di, ni le otorgué el valor que
realmente hoy considero que tiene. Inclusive,
recuerdo haberla tomado con cierta “mofa” durante muchos de esos años. Este
comportamiento por mi parte, quizás se debió, a que quien la utilizaba era mí
estimado suegro, Don Jacinto, tal como solía dirigirme a él, con respeto y
afecto. Pienso que en buena medida no le daba mayor importancia, debido al
hecho de que según él: todo conflicto de cierta importancia ocurrido en el
ámbito del mundo Occidental, y en
especial, en América latina, donde siempre ha habido mucha actividad de ese
tipo, así como también en casi todas las crisis económicas y financieras
ocurridas durante los años citados en Occidente, la culpa fundamental la tenía “El
Gran Poder Económico”. Siempre, de acuerdo con su visión, estaban presentes
los tentáculos del mismo.
Es probable, realmente no lo sé, que me tomara sus
planteamientos con cierta incredulidad y hasta mofa, debido a que mi suegro no
era una autoridad en el tema. Don Jacinto, era un artesano del calzado: fabricaba
en su zapatería, calzado a la medida y de manera muy artesanal. Era un
especialista en calzado, en especial, femenino. Pienso que por esa razón, yo no
valoraba su “cantinela”, conocida también por: hijos, amigos, relacionados, nietos
y hasta alguno de sus biznietos. Con el tiempo y los años, me doy cuenta que
llegué a mofarme de lo que era casi como
un slogan que repetía con frecuencia. Hoy
acepto mi error y reconozco su sabiduría y clara visión.
Es obvio que al estarme refiriendo a un componente que
produce un gran impacto en los asuntos económicos, operativos, financieros y en
cómo se gestionan en función de ello, empresas y organizaciones públicas y
privadas, se trata de algo que sí tiene mucho que ver con el enfoque del Blog.
No hay más que ver las graves consecuencias que se han generado en estos
ámbitos y en muchos otros, en todo tipo de organizaciones y en muchas empresas.
Especialmente en las pequeñas y medianas, en los últimos siete u ocho años.
LA PLANIFICADA CRISIS-ESTAFA
Está claro, que la Crisis-Estafa que llevamos varios años sufriendo en parte de
Europa, y en concreto, en la Europa del Sur, afecta a: empresas,
universidades, centros de investigación
y desarrollo, organizaciones públicas prestadoras de servicios, y en
consecuencia, a la gran mayoría de los ciudadanos, quienes estamos
poderosamente influidos de manera negativa, por el uso del poder y la aplicación de las tesis liberales y ultra-liberales,
que circulan, evolucionan y dominan, desde mi percepción para mal, acorde con
los resultados y consecuencias visibles. Y no es la primera vez, ni será la
última. Digo para mal, porque aumentan de manera importante los ricos, pero
también en proporción mucho mayor, han aumentado: la desigualdad, los pobres,
desempleados, parados, desahuciados, etc., etc., con la consecuencia de un daño
irreparable, especialmente si no se frena ya, y se protege lo que queda de lo
que ha sido el mayor logro de Europa de los últimos años: La construcción del Estado de Bienestar, envidia del resto del mundo.
La
crisis-estafa, por cómo se perpetró, por cómo se ha venido
desarrollando, y por lo deficientemente que ha sido gestionada, especialmente
en Europa, ha dado origen al fenómeno conocido en el sur de Europa, como “austericidio”;
que ha provocado además, una gran crisis social que ha incrementado la
precariedad, la pobreza, la desigualdad y ha generado un gran sufrimiento para
la mayor parte de la sociedad. En unos por la angustia de no saber hasta cuándo
durará y si se podrá resistir; en otros, por que los ha llevado a la ruina
económica y personal.
Ha producido además, una importante crisis política
de impredecibles consecuencias debido al profundo
daño que se ha hecho a la democracia. Hoy dominan: la mentira, la continua manipulación
a los ciudadanos, la corrupción campante sin castigo, el abuso del poder
político, y la inseguridad y angustia de ver como se han dado miles de millones
euros pertenecientes a los ciudadanos para salvar un sistema financiero
inescrupuloso que, aún hoy día, siete años después del inicio de la
estafa, no colabora para nada con el país y sus empresas. En especial con las pymes,
que son la base central de la economía española.
Y si lo que se desea es, dar el necesario vuelco a la economía y al
consumo, como recomiendan: Krugman, Stiglitz, otros grandes economistas
y la situación crítica, la realidad, es indispensable y urgente hacer algo seriamente para crear las
condiciones que permitan restablecer las miles las empresas que han quebrado, y
los millones de puestos de trabajo perdidos y estimular el consumo para crear
un ciclo virtuoso de crecimiento y desarrollo. Ya está bien de hacernos sufrir.
Cada puesto de trabajo perdido es una
persona que hoy sufre y lo pasa muy mal, gracias a las erráticas decisiones
e imposiciones de ese gran poder que
gobierna Europa, y a las de los gobiernos títeres que se han plegado a la
maniobra de que: Hayan sido los ciudadanos quienes tengan que pagar la crisis provocada
por el Poder Económico, representado
entre otros, por la banca, cajas de ahorros, financieras, constructoras e
inmobiliarias.
La percepción hoy es, que nuestros gobiernos en
lugar de trabajar en beneficio de los ciudadanos lo han hecho para beneficiar a
los bancos y al sistema financiero (El
gran poder económico), dejando a los ciudadanos desamparados e impotentes
ante el caos. Lo que comenzó en Wall
Street como estafa a ciudadanos, especialmente,
de clase media baja y baja, se convirtió velozmente en 2008 en crisis financiera en E.E.U.U. Rápidamente gracias a la globalización y a la
activa participación de la City londinense, y algunos bancos de otros países de
Europa, se transformó en una crisis económica y sistémica de alcance general
con un impacto aterrador, especialmente, en los países que conforman el Sur de
Europa. Llevamos ya siete años de crisis y no se vislumbra la salida a pesar de
los cuentos que se inventa a diario el partido y el gobierno en el poder.
EN LOS ÚLTIMOS TIEMPOS
A raíz de la citada crisis-estafa, ciudadanos
que hemos prestado poca atención a los temas de economía, ahora afectados
negativamente por la misma, por cómo se la ha dejado crecer, y por lo
deficientemente que ha sido gestionada, obedeciendo siempre intereses y
estrategias del “Gran Poder Económico” y orientadas,
según señala Sami Naïr en su libro ”El
desengaño Europeo”, (2014), quien
cita: “La política de austeridad ha
tenido como finalidad la profundización de la destrucción de las políticas de
bienestar. Es por lo tanto, una política
de dominación desde la perspectiva de la privatización del sistema económico y social. En todas partes nos
enfrentamos a la privatización de políticas públicas de: Sanidad, Vivienda,
Educación, Pensiones…”
Este tipo de hechos y acciones tan graves de
imposición de una ideología ultra-liberal a ultranza que han venido ocurriendo,
han provocado, tal como se ha podido ver, cientos de marchas y manifestaciones
de protesta de millones de ciudadanos en todo el país. Estos intentos realizados
lamentablemente por el gobierno, obedeciendo directrices europeas responden a
una estrategia, aparentemente, orientada hacia implantar un Nuevo
Orden Mundial, que se viene gestando desde hace ya bastante tiempo. Todo esto, nos ha llevado a interesarnos algo más por conocer y comprender mejor el tema,
su impacto e implicaciones. Avanzaré algunos elementos más en la próxima
entrega.
Cierro la presente señalando que Don Jacinto, no
estaba, en lo más mínimo equivocado. El ignorante e inocente era yo.
1 comentario:
Bendita inocencia, que permite retractarse a tiempo, siguiendo el ejemplo de los sabios; puesto que según el común saber y entender del refranero, ‘es de sabios rectificar’.
Sugiero echar una ojeada a la historia de las 'hipotecas subprime" en :
www.navarraconfidencial.com/2008/09/30/carter-clinton-y-la-paternidad-de-las-hipotecas-subprime/#
Las fechas de aprobación de dicha legislación dan pie a sospechas de planificación de la crisis y la burbuja inmobiliaria.
The Community Reinvestment Act (Ley de reinversión en la comunidad) fue promovida por Carter en 1977 y ampliada por Clinton en 1995, ambos presidentes norteamericanos demócratas. Esta norma establecía una especie de “ley de paridad”, en virtud de la cual los bancos tenían que cumplir con un mínimo de préstamos respecto a colectivos pobres que habitualmente no tenían acceso al crédito. (*)
En el artículo citado se dice que “El motor y la clave de la burbuja, ... es el intervencionismo de la Reserva Federal”, pero no aclara que la Reserva Federal americana es un banco privado. Eso también tiene que ver con Gran Poder económico, ya que al ser privado atiende a sus propios intereses y no necesariamente a los nacionales.
Nota (*) Véase también: El Profesor Abadía y el "Ninja" en crisis
www.youtube.com/watch?v=6Q2237dhNHk
Publicar un comentario