Con la finalidad de
completar la información de los dos últimos post, en un intento por destacar la
importancia de lo estratégico dentro de un Plan
Maestro Estratégico aplicado a nuestro país; añado otros componentes
que facilitan comprender la importancia y utilidad de este tipo de Plan, especialmente
cuando es bien elaborado y adecuadamente implantado.
En esa dirección, veamos
algunas de las características básicas que requiere poseer hoy un buen Plan
para ser efectivo y estratégico:
Características de lo Estratégico en un mundo altamente
cambiante:
- La estrategia tiene que ser dinámica y flexible, para adecuarse fácil y rápidamente a los cambios del entorno, y a las expectativas cambiantes de los afectados: Sociedad, ciudadanos, usuarios, clientes.
- Ser eficaz, efectivo y competitivo en el mundo globalizado de hoy significa “una guerra de movimientos”, donde gana el que se anticipa a las necesidades y demandas, y a responder con prontitud a la satisfacción de las expectativas cambiantes.
- En este ambiente lleno de complejidades, la esencia de la estrategia no viene dada por la estructura de los servicios públicos y/o privados, sino por la dinámica del comportamiento y resultados que se derivan de los mismos.
- Una estrategia claramente definida, bien implantada, comunicada, y que cuente con el compromiso de la mayoría, aporta grandes beneficios concretos, todos de importancia para ser cada vez más eficaces, efectivos y competitivos. Además, resulta altamente motivante y generadora de responsabilidad para con los resultados esperados.
- Permite establecer direcciones y prioridades claras, con elevadas probabilidades de ser exitosas y que, además, aportan la posibilidad de ser únicos, diferentes, eficaces.
- Permite que las actividades que será necesario realizar, se estructuren y ejecuten de manera que apoyen la estrategia global, para lo que es esencial que todo el proceso se realice bien alineado y con participación de todos.
- Concentra los esfuerzos de todos en aquellas áreas y actividades donde se posee ventajas comparativas y competitivas que se consideran prioritarias.
- A través de la adecuada implantación se provee a la organización interna del sistema, de claridad y transparencia para ejecutar de forma eficiente. Lo que se traduce en beneficios, menos desperdicio general y, en consecuencia, mayor calidad y productividad.
- Dado que la dirección es clara para todos, cualquier desviación o ajuste que sea requerido o que ocurra, es más fácilmente detectado y corregido. Resulta que además de las ventajas señaladas, ahora hay gran cantidad de personas monitoreando el progreso.
La reflexión amplia y profunda que requiere llevar a cabo el equipo que realice
la planificación, contribuirá a que se tomen buenas decisiones estratégicas que
conformarán, una vez discutidas y seleccionadas, la nueva estrategia global del
país para los años por venir.
Este Paso, en el que se determina
la Estrategia de Futuro, como ya lo señalé, es el momento culminante de
toda la actividad de realización de un Plan Estratégico Maestro. En este Paso
del proceso de elaboración del Plan, se trata de lograr obligatoriamente consenso
acerca de cuáles serán las Decisiones, o Ejes Estratégicos que van a conformar
la propuesta de valor, o estrategia
global a futuro; lo que llevará
al país a descubrir cómo ser únicos, singulares y eficaces.
Algo que no se puede olvidar es que: “las estrategias que nos han
traído hasta donde nos encontramos hoy, no nos llevarán a dónde se quiere ir,
de ser así, ya estaríamos allí”.
Si en estos momentos se toman buenas decisiones, durante los próximos
tres a cinco años y a veces más, la estrategia determinada, en general, será la
misma aunque algunas de las decisiones puedan tener que modificarse o ajustarse
debido a cambios imprevistos en el entorno.
Lo más común es lo señalado, debido a que permite a todos saber la dirección y en conjunto, conocer
hacia donde hay que remar y poner todo el esfuerzo y la pasión. En esos
tres a cinco años, es mucho lo que se puede hacer para alcanzar, en un
porcentaje muy elevado, el cumplimiento de la estrategia deseada y los beneficios
que de la misma siempre se desprenden.
Si ocurriese el peor de los escenarios y algo esencial cambiase en el
primero, o segundo año de forma violenta, no prevista, habría que ajustar la
parte de la estrategia afectada, lo demás, posiblemente se mantendrá. Por eso
afirmo, que la eficacia y posibilidades de éxito comienzan con una buena determinación
y planificación de la estrategia para enfrentar los impactos y demandas del
entorno, poder cambiar y mejorar hacia
donde es necesario y deseable.
Con lo expuesto considero haber dejado clara la importancia, que dentro
del proceso de planificación estratégica corresponde a este paso.
Al concluirlo, teniendo ya la estrategia
clara, sabemos con precisión: dónde estamos y a dónde queremos ir. Falta concretar algunos componentes relativos a cómo se va a lograr, lo que se
determinará una vez que se tenga definido el Plan de Objetivos de Medio Plazo, a unos 4 a 6 años. Y alineado con el mismo, el
Plan de Objetivos o Metas Anuales. De donde arrancarán los diversos Planes de
Trabajo y de Acción de ahí se comenzarán a obtener los primeros resultados deseados.
Falta también evaluar con qué cuenta hoy el sistema, y qué le falta, para poder alcanzar, con un
grado aceptable de seguridad, los resultados deseados. La evaluación permitirá comprobar si se dispone o no de lo necesario para llegar a donde ya se ha determinado, acorde con la
estrategia que se acaba de elegir y precisar.
En esta dirección avanzaremos en la próxima entrega.
http://innovarlagestion.blogspot.com
http://www.bubok.com/libros/172773/Innovar-la-gestion
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