Observando la realidad reciente, la actual, proyectándome hacia la futura y tomando además en cuenta opiniones de analistas, de expertos, y de artículos serios acerca de la situación hoy en día; se percibe y comprende bien el contexto actual, ocasionado y condicionado principalmente, por la pandemia del covid 19 en el ámbito mundial.
También, debido al hecho derivado de las mutaciones provenientes del mismo, y al observar, como todo ha sido gestionado por gobiernos de diferentes ideologías y países. Unos que lo han hecho mejor, y otros peor. Todo ello debido, en buena medida, al hecho de enfrentarnos a una situación desconocida y terriblemente agresiva, que ha provocado miles de muertos en el mundo.
Lo anterior ha llevado, entre muchas otras consecuencias dolorosas, a que, desde hace unos meses, la inflación esté aumentando, a que se produzcan retardos en la producción y manufactura de diversos artículos y componentes, a que existan retrasos en la entrega de ciertos suministros, cuya escasez está llevando a que la misma vaya en aumento. Según estudiosos, especialistas y otros conocedores del tema, seguirá incrementándose al menos varios meses más, debido esencialmente, a los aumentos de precios provocados por la elevada demanda, versus la escasez de producción y por ello, de suministro.
Si a lo anterior le añadimos las inadecuadas y erráticas actuaciones de la gran mayoría de dirigentes políticos, en varios países, todo ello hace que el panorama futuro se percibe más oscuro de lo necesario. Lo señalado, me lleva a visualizar e indicar que el problema de gestionar y resolver la situación es, en general, bastante compleja y caótica, tal como se ha podido comprobar con las múltiples metidas de pata de cientos de dirigentes políticos de diferente signo, en diversos países y ámbitos de actuación y responsabilidad.
En el caso de nuestro país, que es lo que más nos afecta, y el único que puedo directamente observar, veo una situación complicada y confusa, debido a que los dirigentes gubernamentales, además de confrontar la situación descrita, tienen que hacer frente y bregar de manera continuada, con una oposición, especialmente de derechas, que se opone a cualquier iniciativa propuesta por el gobierno. Con esos comportamientos oportunistas e indeseables dificultan y entorpecen la ya difícil situación provocada por el virus. Lo peor es que actúan así, aunque las medidas puedan ser positivas para la ciudadanía y por tanto para el país. Es un tipo de “oposición tumba gobiernos”.
En ninguna parte del mundo, una organización, sea de la índole que sea, tiene posibilidades de obtener buenos resultados, y eficacia en lo que realiza, si pretende darse el lujo de tener “el enemigo adentro de sí misma”. El “enemigo”, de existir con tal actitud y conducta, siempre hay que “tenerlo afuera y lo más alejado posible”. Esto es clave para la buena salud del organismo. Cientos de estudios y de experiencias con grupos, demuestran lo grave y dañino del fenómeno.
Lamentablemente en la política de muchos países, y en especial, en el nuestro, el “enemigo actualmente está adentro”, en el Parlamento. Que los que sean oposición, oposición, no se sientan atacados, no hay más que ver el clima, ambiente, e inmadurez que muestran en sus intervenciones y comportamientos, vergonzosos y ridículos, muchas de las veces. Y a pesar de todo, aplausos. Parecen estar en el circo.
Que me perdonen las increíbles personas del mundo del Circo. Es que, en el Parlamento, son peores que las fieras, y que las discusiones y peleas callejeras. Todo es “a la contra”. Todo retorcido, amañado, manipulado. De esa forma, es imposible funcionar bien, y cuando esto se logra, el esfuerzo y el coste, han sido exagerados.
No necesitamos esa clase de “líderes” en la oposición. Bueno, personalmente no los considero líderes, porque no lo son. Son meros dirigentes, la mayoría mediocres que, además, en general, se comportan de manera inmadura, psicológicamente. Padecen el denominado “Síndrome de Inmadurez Psicológica”. Es lo que los fuerza a comportarse así: De modo inexperto, bisoño, agresivo, hiriente y manipulador, etc. casi nada. Lo ponen todo muy difícil.
En esas circunstancias si vemos al Parlamento como lo que es, una organización para hacer leyes de calidad para la ciudadanía y, por otro lado, para facilitar, controlar y construir un mejor país, vemos claramente que no cumple a cabalidad sus objetivos. “Mucho enemigo del país, adentro”. Aunque ellos digan lo contrario, sus actos, comportamientos, aportes, acciones van en dirección opuesta a lo que necesita el país y peor, los ciudadanos.
Volvamos al principio, al mundo de las empresas y organizaciones más usuales y dejemos de lado al Parlamento. Como señalábamos, la inmensa crisis descrita al inicio de este post, a quienes más viene afectando negativamente es a empresas, a todo tipo de organizaciones y a los ciudadanos que arrasa en el camino. Cierres temporales, cautividad en el hogar, imposibilidad de llevar a cabo de manera completa la actividad productiva diaria, despidos, ertes, y otros, han tenido un impacto en general, muy negativo y especialmente oneroso; aunque para muchos representa su salvación.
Pensando hacia el futuro, una vez que la situación se vaya normalizando, y/o ante la nueva normalidad, estudiosos, especialistas, investigadores y otros, señalan que hay cinco acciones relevantes que las empresas y demás organizaciones deben emprender desde ya para estar preparadas y en forma, con la finalidad de hacer frente al mundo competitivo y desconocido que depara ese futuro cercano.
Basándose en las dos crisis más recientes 2008-9 y la actual de la Pandemia, hacen sus recomendaciones con la finalidad de que las empresas puedan ir haciendo frente, de forma eficaz y con éxito, a ese nuevo futuro que estará basado en continuos cambios, avances y desarrollos, impactados negativamente, además, por las secuelas de las dos crisis mencionadas.
Cinco recomendaciones esenciales para lidiar con el futuro de forma exitosa.
Para estar en condiciones, no solo de sobrevivir, sino de poder ser exitosas, las valiosas recomendaciones clave son:
1.- Lo primero que empresas y todo tipo de organizaciones deben hacer es: Definir, establecer un camino, una vía de futuro. Esta visión de futuro quedará plasmada en una Estrategia de Acción y Actuación. La nueva, deberá ser diferente de la anterior, que la empresa tenía y que fue la que la condujo hasta donde está hoy.
Definida y determinada esa nueva vía de acción, requerirá de la transmisión y correcta alineación y del compromiso de todos, los departamentos, actividades y recursos de los que la organización disponga.
2.- La segunda, va en la línea de crear y desarrollar una nueva filosofía, ideología, y enfoque de empresa focalizado en la creación, desarrollo y mantenimiento de una cultura, clima y ambiente de trabajo que resulte agradable, motivador, estimulante, retador, de crecimiento y desarrollo para quienes trabajan en la empresa.
Un clima de trabajo basado en equipos de trabajo efectivos excepcionales, donde predomine la colaboración entre individuos, departamentos, y las áreas operativas. Donde el compromiso y la responsabilidad por el resultado final con el trabajo y la empresa sean el enganche fundamental.
3.- Lo anterior señalan los expertos, requiere que hacia el futuro la empresa pueda contar con personas que realmente posean talento para desarrollar nuevas y mejores competencias, capaces, acordes con la complejidad de los nuevos trabajos y tecnologías que se necesitarán en ese novedoso y complejo futuro.
4.- Se requiere una completa digitalización, sistematización, tecnologización y automatización, de las operaciones en lo que sea posible. El móvil, ya no es un teléfono, es todo un sistema de comunicaciones, información, visualización entre individuos, grupos y otros. Los computadores cada vez más rápidos, potentes, flexibles, permiten realizar operaciones en tiempo real, gracias a internet, y en todo el ámbito mundial.
Los algoritmos, la llamada Inteligencia Artificial (IA), la futura computación Quántica, etc., son vehículos que permiten y a futuro cada vez más y mejor, realizar el trabajo, pero para ello se necesita contar de forma imprescindible con gente con gran potencial y talento para desarrollar.
5.- He dejado para señalar en el último lugar a los líderes. Todo lo señalado en los cuatro puntos citados lo tienen que hacer con calidad los líderes, quienes, a su vez, deben ser no solo líderes normales, buenos. Los futuros y complejos retos requieren de la presencia en las empresas y cualquier tipo de organización, de líderes excepcionales, muy capaces y competentes. Y si las empresas no cuentan con ellos, hay que conseguirlos afuera, en el mercado.
Es indispensable capacitar, entrenar y desarrollar al máximo, a los líderes que poseen buen potencial de desarrollo y talento, antes de incorporar, mediante un excelente sistema de selección, líderes externos.
Resumiendo: en los planteamientos finales afirmamos que, sin lugar a dudas, toca a los líderes: 1) Crear y hacer triunfar la estrategia seleccionada. 2) Determinar la filosofía, ideología y cultura de la empresa, de forma que contribuya a que puedan ser eficaces ante la nueva realidad. 3) Es su responsabilidad también, atraer, incorporar, modelar y guiar en su crecimiento y desarrollo al personal con talento.
Por todo lo anterior ratificamos el viejo hallazgo que afirma “cualquier organización o empresa será tan efectiva, de calidad, productiva y competitiva, como lo es el equipo de líderes que la dirige”. No podemos olvidarlo nunca.
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