viernes, 9 de octubre de 2009

QUÉ DEBEN HACER LAS EMPRESAS PARA MEJORAR EN LA COYUNTURA ACTUAL
Nuestro planteamiento ante la realidad que se señaló
Continuando la linea de la primera entrega del blog, basándome en lo allí descrito, en experiencias propias de cambio, innovación y mejora, realizadas en más de sesenta empresas durante los pasados 25 años y, si realmente se desea, tal como lo necesita nuestro país, contribuir a mejorar las organizaciones en general, es indispensable emprender diversas acciones que nos parecen cruciales.
Por otra parte y con la finalidad de que las empresas sean más eficaces, productivas y competitivas; es necesario sensibilizar a líderes y directivos de las mismas acerca de la conveniencia de innovar y cambiar la forma de gestionarlas, vista ésta, desde su más amplia concepción. Hacerlo, puede evitar que muchos de los cientos de millones que se gastan e invierten en el país, en mejora de procesos, formación e innovación, basicamente de índole tecnológica, no caigan, con la frecuencia que sucede, “en saco roto”, no obteniéndose el retorno esperado por que la organización no está preparada para ese cambio.
Acciones que proponemos
1.- Lograr que las empresas se orienten sobre la base de una planificación que les facilite la posibilidad de “visualizar el negocio futuro y llevar a cabo una gestión estratégica de largo plazo”. Para ello, deberán contar con planes muy bien concebidos, que promuevan la participación alineada de todos, y que dispongan de indicadores que periodicamente aporten señales de si se está trabajando tal como se estableció, avanzando con eficacia para alcanzar los resultados previstos. Para ello claridad y seguimiento frecuente son esenciales.
2.- Conforme se vaya avanzando en la dirección estipulada, habrá que ir ajustando y desarrollando, acorde la nueva filosofía de la empresa establecida en el proceso anterior de visualización, una cultura y clima de trabajo más retadores. Que permitan aprovechar y estimular el talento, creatividad y la capacidad de innovar de todo el personal de la empresa, con el que se podrá contar al crearse esas condiciones.
3.- Emprender al mismo tiempo, acciones dirigidas a desarrollar un liderazgo eficaz, excepcional, inspirador. Minimizando el énfasis altamente extendido en el país, basado en dirigir, y muy poco, en liderar. Se requiere obtener un mejor y mayor aprovechamiento del talento y del potencial de todas las personas de la empresa . Ésto, hacia el futuro, es cada vez más determinante del éxito para cualquier organización.
4.- Incrementar un mayor trabajo de equipos potenciados (empowered teams), que mediante mecanismos de cooperación aprovechen mejor todos los recursos de la empresa. Ello se traducirá en corto tiempo en mayor productividad y calidad, lo que incrementa la competitividad de la organización y le permite alcanzar mejores resultados.
5.- Estimular la implantación sobre la marcha, de mecanismos de participación, una toma de decisiones que promueva la implicación y compromiso de las personas basada en el incremento de la confianza. Que se les permita mejorar las formas de ejecutar su trabajo, aprovechando mejor el potencial de cada uno, sus conocimientos, competencias y creatividad. Reforzar y reconocer esos aportes , es clave para mantener una mejora continua que a la larga se traduce en mayor rentabilidad para la empresa.
Llevar a cabo estas cinco grandes acciones permitirá realmente desarrollar verdadera y contínua innovación en la empresa y mejorar su rentabilidad al incrementarse la motivación, pasión y el compromiso de empresa.
Sin embargo, tal como se hace habitualmente, tiende a producirse la conocida “resistencia al cambio y a la innovación” en su sentido más amplio, convirtiéndose en un freno a la mejora de la empresa, al incremento de su productividad, calidad y competitividad. Es eso, lo que realmente mina la rentabilidad que toda empresa necesita para funcionar adecuadamente, y para beneficio de todos.

1 comentario:

JulioG dijo...

Hola Javier,

En relación con este asunto, encuentro con frecuencia que la competitividad se traslada al interior de las empresas, ocasionando luchas entre personas y departamentos.

Y esto, paradójicamente, coloca en desventaja a la empresa frente a sus competidoras, porque mucha de la energía de las personas debe dedicarse a esta confrontación.

¿Cómo conseguir que, a nivel interno, en lugar de competencia exista cooperación, para "tirar todos del carro" en la misma dirección?

Un saludo.